Claves para Instalar una caldera de gas de condensación. Puesta en marcha y legalización. (Parte 5)
Introducción
Las calderas de gas son un elemento esencial en muchos hogares, proporcionando calefacción y agua caliente. Sin embargo, su instalación y puesta en marcha requieren un conocimiento técnico detallado y el cumplimiento de ciertas regulaciones.
Las regulaciones españolas que rigen la instalación y puesta en marcha de las calderas de gas son el Reglamento de Combustibles Gaseosos, que establece los requisitos para la instalación, uso y mantenimiento de los aparatos de gas. Incluye detalles sobre la expansión, modificación, prueba, suministro y mantenimiento de las instalaciones, así como la ubicación, instalación, conexión y puesta en marcha de los aparatos.
En este artículo, explicaremos el proceso de puesta en marcha de las calderas de gas domésticas, la documentación necesaria y las regulaciones españolas que rigen estos aspectos.
Proceso de puesta en marcha
La puesta en marcha de una caldera de gas implica una serie de pasos técnicos que aseguran su correcto funcionamiento:
Apertura de la válvula de cierre: Este es el primer paso y, aunque pueda parecer obvio, es fundamental para el correcto funcionamiento de la caldera.
Configuración del modo de operación de la caldera: Las calderas modernas vienen con varias funcionalidades y modos de uso. Para la puesta en marcha, es importante configurar la caldera en modo de calefacción/invierno.
Verificación de parámetros, como la presión del gas, la presión de la caldera, etc.
Análisis de los gases de combustión. Debe verificarse que se quema dentro de los parámetros especificados por las regulaciones.
Explicación al usuario del funcionamiento de la caldera y entrega del Manual del Usuario.
Además, es importante considerar que la ubicación de la instalación de la caldera puede afectar su funcionamiento. La caldera debe estar conectada a las tuberías de agua y gas y tener una ventilación adecuada.
La puesta en marcha de una caldera de gas consiste en la revisión previa de la caldera y su instalación antes de empezar a usarla.
Legalización: Documentación necesaria
La empresa instaladora debe proporcionar al propietario de la caldera una serie de documentos que certifiquen la correcta instalación y funcionamiento de la caldera:
Certificado de Gas: si la instalación de gas ha sido modificada, requerirá la emisión de un nuevo Certificado de Gas.
Certificado de Instalación de la Caldera: Este es en realidad un conjunto de documentos que incluye: Comunicación a la administración e Informe Técnico. Este último documento certifica que la caldera ha sido instalada correctamente y cumple con todas las regulaciones aplicables. Incluye detalles sobre las conexiones entre la caldera y la instalación de gas del edificio, el sistema de calefacción y el sistema de agua caliente. También revisa el estado de la luz piloto, el sistema de tratamiento de agua y los filtros de agua.
Habilitaciones necesarias de las empresas instaladoras
Para llevar a cabo la puesta en marcha de una caldera doméstica de gas, los técnicos y las empresas deben tener ciertas habilitaciones y cumplir con las regulaciones españolas.
En primer lugar, el personal que realiza la puesta en marcha, mantenimiento o reparación de aparatos de gas debe ser un profesional acreditado para ello. Esto se establece en el Reglamento Técnico de Gas, RD 919/2006. No es suficiente tener la tarjeta profesional de mantenimiento o de instalaciones térmicas para realizar tareas de mantenimiento en calderas o calentadores de gas.
Para poder realizar las tareas de un Agente de Puesta en Marcha, es necesario tener la acreditación de instalador de gas. Cuando se desea realizar tareas de transformación de aparatos debido a un cambio de familia, la acreditación mínima será la de un instalador de gas de categoría B, y también cumplir con requisitos adicionales.
Además, la tarjeta RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios) es obligatoria si la empresa que trabaja como instaladora y/o mantenedora de calefacción, climatización, ventilación y energía solar térmica.
Por otro lado, la Instrucción Técnica Complementaria “Instaladores y empresas instaladoras de gas” del Reglamento aprobado en el Real Decreto 919/2006 del 28 de julio, establece que cualquier instalación de gas solo puede ser realizada, reparada y revisada por instaladores de gas autorizados.
Conclusión
En resumen, la puesta en marcha de una caldera de gas doméstica es un proceso que requiere un conocimiento técnico detallado y el cumplimiento de ciertas regulaciones. La empresa instaladora debe proporcionar al propietario de la caldera una serie de documentos que certifiquen la correcta instalación y funcionamiento de la caldera y los técnicos deben tener la acreditación de instalador de gas y la tarjeta RITE, y las empresas deben estar habilitadas y registradas según la normativa española.
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